Mecatos, gaseosas, y ultraprocesados subirán a partir del 1 de noviembre

A partir de noviembre entrará en vigor el impuesto saludable de la reforma tributaria de 2022. Esto significa que un número importante de productos verán un aumento de precio, como los alimentos ultraprocesados.

Y es que este recargo sin duda alguna ha generado mucha controversia en los últimos años, así que por primera vez en Colombia se va a realizar un cobro a estos productos dependiendo su aporte en azúcares, grasas y sal.

Es decir, los alimentos que tendrán un mayor impacto con este impuesto saludable serán los denominados ‘mecatos’, comidas rápidas, bebidas azucaradas y dulces, ya que serán más costosos y dependerá de la cantidad de sodio o azúcar que estos puedan tener.

Según los datos del Ministerio de Hacienda contemplados en la reforma tributaria, el aumento de precio de este grupo de alimentos se llevará a cabo de forma gradual, con un alza del 10 % en el 2023, un 15 % para 2024 y un 20 % para el 2025.

Así las cosas, un paquete de galletas, que cueste aproximadamente $11 mil, su valor entre noviembre y diciembre será de $12.200.

Para entrar más en detalle, los productos que subirán de precio a partir de noviembre son: confitería; cereales; pastas; chocolate; productos de panadería; embutidos (excepto la mortadela, el salchichón y la butifarra); galletería; helados; salsas, entre otros productos.

Subirán bebidas azucaradas

A este tipo de bebidas también se le aplicará un impuesto dependiendo la cantidad de azúcar añadido por cada 100 mililitros.

Es decir que si una bebida contiene más de seis gramos de azúcar pero es menor a 10 gramos, se le aplicará un impuesto de $18 en 2023, $28 en 2024 y $38 en 2025.

Estas bebidas en detalle son: gaseosas; tipo té o café; a base de malta; refrescos; bebidas energizantes; néctares de fruta; mezclas en polvos y aguas saborizadas.

El objetivo del Gobierno

«Es de anotar que esta medida del Gobierno nacional se encuentra orientada en la salud de los colombianos, dado que su objetivo es incentivar a las familias a que reemplacen los productos perjudiciales para la salud por otras opciones. Esperan recaudar un promedio de $3 billones hasta 2025 con este impuesto.